Al principio, la vida en la isla resultará un pelín rudimentaria, ya que solo contarás con una tienda de campaña y tu imprescindible Nookófono. ¡Pero no te preocupes! Si das un poco el callo, convertirás la isla en el hogar ideal. Como dicen por ahí – para que las cosas salgan bien, es mejor hacerlas uno mismo.
Consigue proyectos de bricolaje y, a continuación, reúne los materiales necesarios. Crea herramientas de uso cotidiano o muebles de exterior para hacer más cómoda la vida a todo el mundo. Decora la isla dando rienda suelta a tu vena creativa, o construye puentes, caminos, rampas de acceso y ríos para darle al terreno la forma que te apetezca. Todo esto te llevará tiempo, pero ¡luego podrás fardar de isla todo lo que quieras!
¡Cuantos más, mejor!
¡La gracia de convertir la isla en un auténtico paraíso es poder compartirlo con los demás! Al principio solo habrá un par de habitantes, pero, a medida que mejores la isla, irán llegando más. Ayúdalos a asentarse en el lugar y échales una mano con las tareas, envíales regalos, organiza sesiones de fotos en la isla de Fotopía y mucho más. ¡Quien tiene un amigo, tiene un tesoro!
Un mundo con vida propia
El tiempo discurre y las estaciones cambian, los habitantes se dedican a sus quehaceres cotidianos… La vida en la isla sigue adelante incluso cuando no estés jugando. ¡Disfruta de las maravillas de cada estación en tu nuevo hogar!
No te pierdas el boletín informativo diario de Tom Nook, en el que informará de las últimas novedades. Ciertos eventos, como festividades especiales y torneos de pesca, se celebran puntualmente. ¡Quién sabe las sorpresas que te esperan cada día! Disfruta de cada evento mientras dure, y luego prepárate para recibir el siguiente con los brazos abiertos.
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